...

miércoles, 24 de abril de 2019

Galeria De Imágenes






Cofradias


Partes De La Danza

MOVIMIENTOS DE LOS NEGRITOS.- Consiste en el desfile de la cuadrilla, por las calles de la ciudad haciendo visitas a los templos de Huánuco, Instituciones públicas y nacimientos del niño Jesús. Se desplaza en columna de dos, ejecutando las danzas al compás de la música, en forma sincronizada derrochando belleza en coreografía y vestimenta.
Cada día, trasladan al Niño en anda conducido por señoritas uniformadas desde el domicilio del mayordomo hasta el templo, la comparsa se desplaza al son de la música, cohetes y aglomeraciones del público transeúnte y vecinos.



MUDANZAS.- Llamadas figuras o números, se ejecutan en el frontis de los templos, Instituciones públicas y domicilios. Donde hay nacimientos del Niño Jesús. Las mudanzas pueden ser de 3 a 5 o más figuras. Los Caporales, se ubican a los extremos de las dos columnas desde allí se desplazan con pasos rítmicos, dando ligeros saltitos hacia adelante con un pie y el otro suspendido. Al encontrarse en el centro, empiezan a mostrar figuras, que consiste en ciertos movimientos sincronizados por ambos caporales. Los movimientos demuestran gallardía y belleza, regresan a su posición inicial. 
Terminada la demostración de los caporales, los pampas deben repetir los mismos pasos de la figura cada mudanza, tiene su nombre y su significado y se diferencia de las anteriores por el particular movimiento que realiza los caporales, en el centro una de ellas se llama por ejemplo: tirabuzón, cuando bailan mirándose por los costados. Las Mudanzas, fueron consideradas por el escritor Esteban Pavletich (1972:5) como un ballet popular, donde los caporales ponen como muestra la figura inicial de la Danza, breves y rítmicos saltos, apoyándose ya sobre el pie o sobre el otro y entre cruzando primeramente los brazos y seguidamente las piernas, sin romper en ningún instante la cadencia de la música. La cuadrilla, integrada por los negros más Jóvenes acompañan las evoluciones de los Caporales, haciendo tintinear armoniosamente sus campanillas y seguir con atención los movimientos que aquellos aderezan.



ADORACION.- Se realiza delante de la imagen del Niño Jesús, en el interior o en el frontis del templo o domicilios, donde haya nacimientos todos sin pastorinas, ni sombreros, solo con mascaras. Los caporales y pampas en pareja, se desplazan ante el Niño. Allí, uno de ellos se arrodilla y el otro, da vuelta alrededor de su compañero con las manos hacia arriba, agitando la campanilla a manera de palmada, demostrando su reverencia y alegría por el nacimiento del Niño Dios. Las parejas, se turnan en el culto. Cada pareja, se acerca al Niño, efectuando determinado número que pueden ser con las manos en Cruz, sobre el pecho con los chicotillos en cruz, o acercarse arrodillados como lo hacen de la Catedral.
Terminado la adoración por parte de los Negritos o pampas, los Corochanos se acercan a la imagen en columna, tomando con las manos, las puntas de las levitas y danzan delante del Niño, dando palmadas a sus cabezas calvas, en son de alegría por el Nacimiento.



Vestimenta

LA MASCARA.- Es de charol negro con rasgos físicos de un africano, con los ojos salientes de vidrio. Boca abierta o semi abierta con dientes blanquecinos, labios gruesos y rojos. Cada máscara, se diferencia de otras por su particular expresión facial, ya sea de serenidad o de tristeza. Además están adornadas de collares de perlas, que dan mayor vistosidad a los negros. Los negritos por norma, no deben sacarse las máscaras para no ser identificados. Los niños temen mucho a estas máscaras.

Imagen

EL COTÓN.- Especie de chaqueta o casaca. Es de terciopelo azul, blanco, negro, verde. Grande o de otro color primorosamente bordados con dibujos de tipo barroco, con motivos navideños, temas nacionales, animales, plantas, etc, entretejidos con hilos dorados o plateados con incrustaciones de perlas, lentejuelas, cuentas de cristal. En los hombros llevan charreteras doradas y brillantes. Asimismo cintas largas de varios colores, penden desde ambos hombros del negro hacia la espalda hasta la altura de los tobillos.


Imagen

EL CHICOTILLO.- Es una cadena de eslabones de metal, rematada en una campanilla que es agitada con la mano derecha, al compás de la música y los pasos de la danza. Al bailar el chicotillo es extendido con las dos manos en forma horizontal. Antes el chicotillo era de planta hoy es de plomo.

LOS BOTINES.- Están bordados de terciopelo del mismo color que los cotones. En los laterales rezan los hombres de las cuadrillas a la cual pertenece.

EL PANTALÓN Y LA CAMISA.- El pantalón es de seda, con franjas bordadas en los laterales que se adhieren desde la cintura hasta los tobillos. A manera de guirnaldas, llevan pañuelos adheridos con prendedores a la altura de los muslos delanteros y en la parte posterior a 2 ó 3 niveles. Cada día, la cuadrilla cambia de color de los otros. Los pampas, tienen pantalones del mismo color, menos los caporales. Las Camisas son de color blanco por lo general. También cambian de color cada día.

LA CORBATA.- Es bordada del mismo color de los cotones y botines. Algunas corbatas al centro llevan el estampado de la virgen del Niño Jesús o el Señor de Burgos, como la cuadrilla de la catedral.

 

Imagen 

Personajes

LOS CAPORALES.- Son jefes mayores, quienes enseñan al resto de los negritos las diferentes mudanzas. Guían y ordenan a los “pampas” que mudanzas hacer. Se visten de manera más vistosa y se colocan a la cabecera de cada lado de la cuadrilla, bailando de manera más elegante y señorial.
Representan a los caporales de las cuadrillas de peones de las haciendas, son directores de las faenas de trabajo de campo de los negros. 
Son dos caporales por una cuadrilla de negritos. De vez en cuando, encabezan bailando, generalmente caminan por el centro de la cuadrilla, en el desplazamiento por las calles de la ciudad.



LA PASTORINA.- Sombrero rígido de cartón forrado, parecido al de charro mejicano, con tiesas alas de cuyos bordes cuelgan mallas de perlas menudas. Una toquilla, cinta ancha, bordea el sombrero con el nombre de la cuadrilla o cofradía de los negritos. Un plumaje o penacho multicolor, de un metro de altura se rige verticalmente del sombrero, ajustado con un pasador largo al cuello del negro. Antiguamente se usó el sombrero de paja.


LOS NEGRITOS DE PAMPA.- Son los negros que obedecen las órdenes de los caporales y ejecutan las mudanzas enseñadas. La música es festiva y el bombo lleva el ritmo característico.
10 a 12 parejas bailan en 2 filas. Los negros visten un cotón adornado en lentejuelas y cintas, un sombrero de plumas, una máscara de negro y en sus manos llevan una “chicotillo” que representa la cadena de la esclavitud. Los “chicotillos” finalizan en una campanilla, que hacen sonar a la vez que ejecutan la danza.


COROCHANO.- A medida que la danza iba creciendo, se incluyeron a otros personajes principales y pintorescos. Así por ejemplo, en Huánuco por aquellos años, vivía en nuestra ciudad un barbero apellidado Gorrochano descendiente de Don Fermín García Gorrochano.
Por herencia, era cascarrabias y enemigo de los niños, quien chicote en mano trataba de enseñar a los niños, el respeto a los mayores, por lo que los pequeños le tuvieron terror y pánico. Cuando éstos se hicieron jóvenes, en navidad, aparecían lo negritos y para ridiculizarlo se disfrazaban de Corochano y espantaban a los niños, a medida que los danzantes avanzaban por las calles.
El Gorrochano o Corochano, como se les llama actualmente, es un personaje autoritario y satírico. Representa a los Corregidores españoles (representación burlesca del corregidor español) (Varallanos 1987: 13). Durante el recorrido de la cuadrilla, algunos Corochanos danzan por su cuenta al compás de la música y otros abren campo, guardan el orden en los espectadores, corrigen los errores que cometen los pampas o los reemplaza, desvían el tránsito, solicitan algún regalo en la bodegas, sino roban descaradamente lo que encuentran en su paso, también enamoran a las muchachas, cargan bebés o criaturas, persiguen a latigazos a los mozuelos que les fastidian o sueltan alguna gracia a las personas según sus edades.
Los Corochanos, son los únicos personajes permitidos a hablar o dialogar con el público. Se disfrazan con máscaras blancas que simbolizan a viejos y calvos con sus narices rojas, alargadas y torcidas hacia arriba, con bigotes, barbas blancas y largas; algunos corochanos lucen colmillos y narices de chancho, perro ó mono.
Llevan sombreros negros de tipo cordobés con cintas y plumas. Cubre su cuerpo con una levita negra, especie de capa o sacón, que por la espalda llega en dos puntas hasta las pantorrillas. En los hombros cargan las charreteras doradas o plateadas con cintillos amarillos o blancos. A esto se agregan las franjas, pecheras o chalecos, fajas, corbatas y botines bordados.
Los pantalones son de seda, camisas y guantes blancos. Pañuelos prendidos a la altura de los muslos; así completan los disfraces. Con la mano derecha empuñan la matraca y con la izquierda el rebenque o chicotillo, que le permite al corochano mantener la disciplina y el orden.



EL TURCO Y LA DAMA.- Son otros dos personajes, que representan a los tratantes de los negros. Ellos, mientras la cuadrilla de negritos danza, orgullosos, como si fuesen dueños de la fiesta, se pasean de un extremo a otro, tomados de los brazos. Como amos, caminan vistosos, elegantes y orgullosos alrededor de la cuadrilla como muestra de poder.
El turco, representa al encomendero español y la dama a su esposa. El turco es el encomendero poderoso señor, que cobra los tributos y negocia con los indios, se viste casi igual que el abanderado con zapatos finos, medias largas y pantalón corto. Una casaca con faja a la cintura, capa, máscara con bigotes y peluca, sombrero de cordobés con plumajes y guantes blancos.
La Dama, o matrona española, luce un vestido de gala, una saya que cubre el cuerpo, guantes blancos, sombrero cubierto con velo blanco y su cartera. Algunas damas llevan anteojos claros.
El turco y la dama, siempre se desplazan de brazos. El turco, coge con el brazo derecho al de la dama y ella con el brazo izquierdo, así participan en la danza, con pasos suaves moviendo el cuerpo levemente de un lado a otro al compás de la música.



EL TURCO Y LA DAMA.- Son otros dos personajes, que representan a los tratantes de los negros. Ellos, mientras la cuadrilla de negritos danza, orgullosos, como si fuesen dueños de la fiesta, se pasean de un extremo a otro, tomados de los brazos. Como amos, caminan vistosos, elegantes y orgullosos alrededor de la cuadrilla como muestra de poder.
El turco, representa al encomendero español y la dama a su esposa. El turco es el encomendero poderoso señor, que cobra los tributos y negocia con los indios, se viste casi igual que el abanderado con zapatos finos, medias largas y pantalón corto. Una casaca con faja a la cintura, capa, máscara con bigotes y peluca, sombrero de cordobés con plumajes y guantes blancos.
La Dama, o matrona española, luce un vestido de gala, una saya que cubre el cuerpo, guantes blancos, sombrero cubierto con velo blanco y su cartera. Algunas damas llevan anteojos claros.
El turco y la dama, siempre se desplazan de brazos. El turco, coge con el brazo derecho al de la dama y ella con el brazo izquierdo, así participan en la danza, con pasos suaves moviendo el cuerpo levemente de un lado a otro al compás de la música.

Historia

En la época colonial, los patrones daban libertad a los esclavos desde el 24 de diciembre hasta el 6 de enero. Esos días, eran aprovechados por los esclavos para celebrar la Navidad, vistiendo los nacimientos que lucían en las casas de las familias más pudientes.  A partir del Decreto promulgado por Ramón Castilla sobre la libertad de los negros el 13 de diciembre de 1854, las cofradías hicieron su aparición en las calles, visitando no solo los nacimientos sino también las iglesias, donde bailaban y bebías. Los dueños de los nacimientos en recompensa les invitaban huarapo, shacta, años después el locro. Así lo hicieron los años sucesivos y de esta manera se institucionalizó el baile y Danza de los Negritos.

El baile de los Negritos, una de las danzas más populares del centro peruano - Huánuco -, nos habla con ironía del rigor de la colonia, aquel tiempo en que los esclavos cultivaban caña en las haciendas huanuqueñas. Sin embargo, por esos curiosos quiebres que dan las tradiciones, ha pasado a ser un festivo modo de expresar cariño al Niño Jesús. Las cofradías de los "negritos" salen a recorrer la ciudad, luciendo sus máscaras y sus mejores galas. En el elenco de danzantes destacan los corochanos, personajes querepresentan a los caballeros españoles pero con aires bufonescos.

Sus inicios se pierden en el año de la colonia cuando los hombres de color fueron traídos al Perú desde Cafre y otros pueblos del Africa para los trabajos en las haciendas, la minería y los conventos. Es muy importante señalar el Decreto promulgado por Ramón Castilla sobre la libertad de los negros el 13 de diciembre de 1854. A partir de esta fecha, conjugando el nacimiento del Niño Dios, las cofradías nombre que proviene del lugar de orígen desde donde fueron traídos, organizados con muchas limitaciones en las haciendas, hicieron su aparición en las calles. Los danzantes al son afroide del bombo visitaban los nacimientos y las iglesias. Allí bailaban y bebían. Los dueños de los nacimientos en recompensa les invitaban huarapo, shacta, años después el locro. Así lo hicieron los años sucesivos y de esta manera se institucionalizó el baile y Danza de los Negritos.

Con el correr de los años los hombres de color fueron exterminándose, por lo que tuvieron que ser reemplazados por los mestizos y luego por lo blancos. Como la danza era de los negritos, éstos tuvieron que confeccionarse máscaras.

El 15 de noviembre de 1820, en Huánuco, se realizo la juramentación de la Independencia del Perú.  Años antes y posteriormente a la fecha citada,  el pueblo huanuqueño jugó un papel preponderante, en la lucha por la emancipación. En 1812, en la provincia de Ambo, se enfrentaron de Tres a Cuatro Mil hombres al ejército español, librándose una batalla en la que fueron derrotados los patriotas. Los caudillos condenados a muerte y sus bienes confiscados.

Años después,  lucharon en las batallas de Junín y Ayacucho, siendo Huánuco el lugar de aprovisionamiento al ejército, gracias a su estratégica posición geográfica. De 1821 a 1824, actuaron las guerrillas campesinas, entre Huánuco y Yauli, con participación del pueblo indígena para mantener la independencia,  incluso la comunidad de Huacar, cedió sus tierras al Estado para ayudar económicamente al ejército peruano comandado por Bolívar.

El 3 de noviembre de 1854,  el Mariscal Ramón Castilla, promulga  la Ley de Libertad a los esclavos negros. Estos, en multitud se retornaron a sus lugares de origen. Esta ley dio origen,   al nacimiento de una danza,  que se propagó a los lugares muy apartados del Perú. Actualmente, es bailada por hombres de ascendencia indígena, pero con el mismo contenido histórico – social.

Relatando sus penurias y la liberación de los esclavos negros, como recuerdo de su descendencia.  Se baila en muchos pueblos del Perú, bajo diferentes nombres: Morenada, Negrería, Pachawuara, Negros viejos, Rey Moreno, Negritos, etc.

Esteban Pavletich, sostiene que  la danza “Los Negritos de Huánuco” tuvo su origen,  en los galpones de los esclavos. Salió a las calles, cuando llegó de Huancayo la noticia de la liberación de los negros. Por ellos,  se celebra en los últimos días de diciembre, coincidiendo con la fiesta de Navidad.  La danza de “Los Negritos de Huánuco“, que representa diversos pasajes de la vida de los esclavos negros, desde su llegada en el siglo XVI y durante la Colonia, hasta su liberación, se baila desde el 24 de diciembre hasta el 6 de enero en homenaje al niño Jesús.

Mientras tanto, José Varallanos (1987) afirma que la Danza de los Negritos, nació en la Colonia “en las ciudades y villas de encomenderos y acaudalados propietarios de esclavos”. Porque los negros, mulatos imitaban los bailes, danzas y  música de sus amos, practicando en los galpones, corrales y las plazas públicas. En la época de la Colonia los nobles,   daban libertad provisional a sus esclavos durante los días de Navidad. Éstos, para ganarse el sustento, recorrían calles visitando Nacimientos en las casas de los nobles y, vestidos de gala,  con ropa en desuso que les regalaban los amos, bailaban y cantaban ante el Niño Jesús,  a cambio de la comida y bebida que les ofrecían los señores.

Los Caporales y Pampas, nacieron en los fundos. Pero  la  escenificación de la danza misma, era una  simulación al problema de la esclavitud por la masa indígena, que se identificaba con los negros. Por la  similitud  de  sus  problemas y, como  también sufrían  castigos y humillaciones, la danza, les serviría como válvula de escape,  para manifestar su descontento y protesta ante el yugo español.

Como quiera que, en el imperio de los incas la iniciación de los príncipes,   se celebró con fiestas y regalos, desde  la  Colonia  hasta  nuestros  días,  se rinde homenaje   al  Niño  Jesús . Representado por una bella imagen de madera tallada y policromada, con  evidente ascendencia española. Lujosamente vestida, con ropajes de terciopelo,  bordados con hilos de oro y plata,  a través de la danza.

Actualmente la de “Los Negritos de Huánuco”,  ha sufrido numerosos cambios desde su origen. Se ha enriquecido con los acontecimientos históricos locales, como iremos viendo  en el estudio del vestuario de los personajes que forman la cuadrilla.
Durante la celebración de la Navidad, los integrantes de diferentes cofradías bailan por las calles de Huánuco ante la población, compitiendo entre ellos en cuanto al lucimiento de su vestimenta, agilidad y destreza al compás de la música afro-hispana.

El inicio del baile es realizado por ''Los Caporales'', representados por dos negros con los rostros cubiertos con máscaras relucientes de cuero, elegantemente vestidos con trajes de terciopelo oscuro, bordados con hilos de oro y plata, cintas de cristal, lentejuelas, se atavían con adornos caprichosos que cuelgan de su pecho y en los hombros portan charreteras doradas.

Complementan su vestimenta con vistosos sombreros de plumas de colores encendidos, colocándose cascabeles en las piernas para llevar conjuntamente con sonoras campanillas de bronce y gruesos látigos, el compás de su música contagiante, son los que señalan a la cuadrilla los pasos a seguir.

Otro personaje de raída chaqueta y larguísima barba constituye un integrante importante de la danza, es el "Corochano", que representa mediante su máscara a un viejo hidalgo de la nobleza española, quien con su matraca y látigo que agita constantemente gasta bromas al público y asusta a los niños.

Las manifestaciones de alegría y danzas de la cuadrilla de los Negritos con los demás personajes, es realizada alrededor de dos figuras centrales: ''El Turco'' y ''La Dama'', símbolos de la nobleza española y propietarios de la hacienda, quienes eran los dueños de los esclavos hasta el momento de su liberación. Otro personaje es el ''Abanderado'', de raza blanca, que cubre su rostro con una careta de dicho color, quien se desplaza entre los negritos portando una bandera de libertad.

Inicio

Este blog es producto del estudiasnte del 4° "A" de seccundaria del colegio Isaac Newton, Jesús Durand Rivera.

Traductor